Cuadradito
quiere jugar en casa de sus amigos Redonditos, pero no pasa por la puerta
porque… ¡La puerta es redonda como sus amigos! «¡Tendremos que recortarte las
esquinas!», le dicen los redonditos. «¡Oh, no! –dice Cuadradito– ¡Me dolería
mucho!» ¿Qué podemos hacer? Cuadradito es diferente. Nunca será redondo.
Un libro sobre la amistad, la diferencia y la exclusión. Los cuadrados nos demuestran que nada es inamovible y que es posible cambiar esquemas.